10 lugares repletos de historia en La Valeta

La Valeta es la capital de Malta, una ciudad vibrante que pese a su reducido tamaño tiene muchos lugares de gran interés histórico y artístico. Cada calle, cada templo y cada rincón tiene una historia que contar al visitante, y a pesar de su relativa juventud (unos 450 años), desprende ese aire nostálgico de las ciudades que han visto caer sobre sus hombros el paso del tiempo.

En este artículo podrás conocer algunos de los lugares que ver en La Valeta más interesantes, así como algunas de las curiosidades que hacen de esta ciudad un lugar místico y lleno de leyendas. ¿Comenzamos?

Qué ver en La Valeta: la capital de la Orden de Malta

La Valeta es una ciudad pequeña, algo deteriorada por el paso del tiempo y ahogada en una península que no la deja expandirse. Pero también es un lugar bello, repleto de historia a cada paso y con unas calles que desprenden esa melancolía que solo podemos comparar con Oporto. La mezcla de culturas y religiones, así como los zarpazos provocados por las innumerables guerras que ha tenido que sufrir, hacen de La Valeta un lugar interesantísimo de visitar.

La Valeta está salpicada de templos, palacios, castillos e iglesias que tienen como denominador común a los Caballeros de la Orden de Malta. De hecho, el nombre de la ciudad se lo deben a Jean Parisot de Le Vallette, un caballero francés que llegó a ser Gran Maestre de la Orden de Malta. Su gesta más importante fue la de contener el asedio y ataque del Imperio otomano en el año 1565.

Escultura Jean La Vallette Malta

El objetivo otomano era conquistar Malta para utilizarla como base de operaciones e invadir Europa, pero gracias a la resistencia feroz de los caballeros en Birgu y también en el fuerte de Sant Elmo, esto nunca sucedió. Su heroica resistencia a lo largo de 30 días minó la moral de los otomanos, que finalmente se rindieron. Tras este acontecimiento, Jean Parisot mandó construir en el año 1566 la ciudad que a día de hoy se conoce como La Valeta en su honor.

La ciudad fue diseñada por el prestigioso arquitecto italiano Francesco Laparelli, asistente de Miguel Ángel y posteriormente de Gerolamo Cassar, también muy presente en La Valeta.

Auberge de Castille

El Auberge de Castille es la actual residencia del primer ministro maltés, pero sus muros esconden una gran historia. Este precioso castillo fue construido por los Caballeros de la Orden de San Juan en la década de 1570 con el objetivo de albergar a los caballeros procedentes de Castilla, León y Portugal. Sus enormes ventanales verdes y la majestuosidad de su bandera, ondeando en lo más alto de su fachada, lo hacen inconfundible. Se encuentra ubicado en la céntrica Castille Place, muy cerca de los Upper Barrakka Gardens, otro de los lugares que hay que ver en La Valeta con una historia trepidante.

Upper Barrakka Gardens

En nuestra visita a La Valeta aprovechamos también para visitar los Jardines de Upper Barrakka, otro de los lugares que atesoran una gran historia de la capital maltesa. Igual que muchos otros lugares que hay que ver en La Valeta, los jardines fueron construidos originariamente por los Caballeros de la Orden de San Juan como lugar de enterramiento de los caballeros italianos.

Como su nombre indica, los jardines se encuentran en la parte superior de las murallas, y es necesario coger un ascensor (1€ subir; bajar es gratis) que te eleva más de 20 pisos hasta alcanzar la parte superior de las murallas. La vista desde ahí arriba es impresionante, y permite ver con exactitud que la muralla que protege la ciudad es prácticamente inexpugnable.

Upper Barrakka La Valeta

Los jardines de Barrakka ofrecen unas vistas privilegiadas de las Tres Ciudades de Malta: Cospicua, Senglea y Vittoriosa. Mirar al frente es hacerlo a estas tres ciudades vecinas que observan desde un lugar de privilegio la belleza atemporal de Malta. Además, en los jardines se pueden ver cañones reales del siglo XVI que se utilizaban para atacar a los barcos enemigos que arribaban a puerto. Al medio día es posible ver un cañonazo real con munición de la época. Nosotros lo vimos de casualidad, pero el estruendo y la polvareda que provocó fue de tal magnitud que nos hubiéramos enterado aunque hubiésemos estado entretenidos con otra cosa.

Cada día a las 12h los guardias realizan un cañonazo con los cañones del siglo XVI que todavía se conservan en los jardines. El mejor lugar para disfrutar de las vistas y del cañonazo es el famoso Saluting Battery.

Como curiosidad, decir también que en estos jardines se encuentra un busto de Winston Churchill, quien se paseó por estos jardines antes de reunirse con Roosevelt y Stalin en una de las cumbres que decidirían el destino de la Segunda Guerra Mundial.

Paseo de los Upper Barrakka Gardens en La Valeta

Fort St Elmo

El Fuerte de Sant Elmo es un lugar icónico de La Valeta. Sin la resistencia de sus muros, probablemente esta ciudad hoy no existiría (o al menos, no de la forma en que la conocemos). Sus cuatro paredes fueron claves durante el asedio otomano a Malta del año 1565, ya que los Caballeros de la Orden de San Juan (comandados por La Vallette), lograron resistir tras sus torres 30 días de ataques.

El fuerte es clave para defender la entrada de los dos puertos y fue construido con forma de estrella por el ingeniero militar Pietro Pardo a mediados del siglo XVI. En la actualidad alberga el Museo Nacional de la Guerra de Malta.

Fuerte de Sant Elmo en La Valeta

Concatedral de San Juan

La Catedral de San Juan de La Valeta es, junto al Auberge de Castille, el edificio más importante de la capital maltesa. Por eso, debe aparecer siempre en la lista de lugares que ver en La Valeta. Su origen se remonta a los primeros años de la ciudad, ya que el Gran Maestre Jean de la Cassière la mandó construir para convertirla en la iglesia principal de los Caballeros Hospitalarios de la Orden de San Juan.

Lo más curioso de esta Concatedral es el increíble contraste entre el exterior y el interior. Por fuera, se trata de un edificio típicamente maltés y de la Orden: sobrio y sencillo. Por dentro, es un ejemplo del arte Barroco en su máxima expresión. En su interior se pueden ver también cuadros de Caravaggio, como por ejemplo “La decapitación de San Juan Bautista“, considerada una de las obras más importantes del genial pintor.

Precio de la entrada: 10€

Horario: de lunes a viernes de 9:30 a 16:30 / sábados de 9:30 a 12:30

Catedral de San Juan de La Valeta

Museo Nacional de Arqueología

El Museo Nacional de Arqueología fue otra de nuestras visitas en La Valeta. La entrada cuesta 5€ y hay que dejar 20€ de depósito para la audioguía. El museo en sí no es excesivamente grande, pero esconde los principales restos arqueológicos de Malta en su interior. Uno de ellos es la escultura de “La dama dormida”, que se encuentra expuesta en una de las salas dedicadas a la etapa prehistórica. Verla de cerca nos sirvió para entender que el pueblo que habitó Malta antes de la Edad de Bronce no solo tenía la tecnología suficiente como para crear grandes templos y necrópolis, sino que también contaba con artistas refinados capaces de hacer obras de arte con un gran detalle.

Puedes saber más acerca de los templos prehistóricos en nuestro artículo sobre el Hypogeum Hal Saflieni, una necrópolis subterránea muy cercana de La Valeta y de un gran interés histórico.

También podréis ver las llamadas “diosas gordas”, esculturas de mujeres que se relacionan con la fertilidad. Por último, en el museo también podréis conocer con mayor profundidad la época fenicia de Malta y visitar una colección de numismática muy interesante, en la que se pueden ver monedas de la Antigüedad.

Museo Nacional de Arqueología

Grand Master’s Palace

El Palacio de los Grandes Maestres es uno de los edificios más importantes que hay que ver en La Valeta. Fue construido por mandato de los Caballeros de la Orden de San Juan a finales del siglo XVI. El arquitecto fue Gerolamo Cassar, aunque su obra original continuó expandiéndose a lo largo de los siglos, especialmente en el siglo XVIII bajo las órdenes del Gran Maestre Pinto.

En la actualidad, el Grand Master’s Palace alberga una increíble colección de armaduras barrocas, aunque la entrada es bastante cara en relación a lo que se puede ver en su interior.

Precio: 10€ la entrada general / 7€ para jubilados y niños

Horario: de lunes a domingo de 9 a 17

Grand Master's Palace La Valeta

Memorial de la II Guerra Mundial

Malta fue una importante colonia británica hasta el año 1964, cuando logró su independencia del Imperio. Es por eso que durante la II Guerra Mundial fue uno de los puntos estratégicos para los Aliados, y por lo tanto, uno de los objetivos principales de Mussolini y Hitler desde el inicio de la guerra.

Este conflicto, así como los muchos otros conflictos que los malteses han tenido que sufrir a lo largo de la historia, han forjado un gran carácter entre su gente. Este bonito memorial hace honor a todos los malteses caídos durante los ataques a Malta entre los años 1940 y 1943. La obra está diseñada por Michal Sandle, quien también diseñó la escultura dedicada al soldado caído, que también forma parte de este bonito memorial.

Memorial de la II Guerra Mundial La Valeta

Como curiosidad, este memorial tiene a sus pies unas casitas de pescadores muy curiosas. Sin duda, este pequeño rincón de La Valeta recoge gran parte de la personalidad de este gran país: su vocación marítima y su carácter forjado a través de las guerras.

Entrada a La Valeta y sus murallas

La puerta principal de La Valeta es otro de los puntos con interés de la capital maltesa, ya que en esta parte de la ciudad se puede observar con gran lujo de detalle los enormes muros de la ciudad. Con esos torreones, el foso y unos muros de más de 50 metros de altura resulta difícil imaginar cualquier tipo de ataque a esta ciudad. ¡Probablemente una de las más seguras del mundo!

Murallas de La Valeta

Biblioteca Nacional de La Valeta

La Biblioteca Nacional es otro de los edificios que mezclan dos de los acontecimientos más importantes de Malta: la historia de los Caballeros de la Orden de San Juan y la ocupación británica. El edificio fue construido en la década de 1550 y actualmente alberga documentos y libros vinculados directamente con la Orden de San Juan. En su entrada, además, aparece una estatua de la reina Victoria de Inglaterra, simbolizando la presencia británica en este bonita isla mediterránea durante muchas décadas.

Biblioteca de La Valeta

Calles de La Valeta

Otra de las cosas que hay que ver en La Valeta es sin duda su gente, sus calles y su vida. Como hemos dicho con anterioridad, a pesar de de lo “joven” que es la ciudad, callejear por ella se convierte en toda una experiencia. Sus casas tradicionales, hechas de piedra de color arena, tienen unos característicos ventanales salientes que nos recuerdan a los edificios más simbólicos de otra ciudad dorada: la de Jaisalmer, en la India.

En realidad, y a pesar de la gran influencia que ha ejercido la religión católica y posteriormente el Imperio francés y Británico, La Valeta tiene algo que nos recuerda a ciudades más cercanas a Oriente Medio. Su personalidad, su gente, los colores de sus muros y esos atardeceres anaranjados desde las murallas…sin duda, aún sigue muy vivo el legado fenicio en la capital maltesa. Para ejemplo, la imagen que os dejamos a continuación: una calle que llena de ventanales de colores que termina en el Fuerte de Sant Elmo iluminado con el sol del atardecer. ¿Qué más se puede pedir?

Si vas a visitar Malta y te interesa su pasado fenicio, el pueblo de Marsaxlokk es una visita obligada.

Historia de La Valeta…y de Malta

Tal y como hemos contado un poco más arriba, la ciudad fue fundada por los Caballeros de la Orden de San Juan en 1566, tras el asedio de los otomanos. Su nombre rinde honor al Gran Maestre que comandó al ejército maltés durante el gran asedio, Jean Parisot de La Vallette.

Esa historia, probablemente la más importante y conocida, no debe dejar de lado otro de los acontecimientos más importantes de la capital (y de Malta): la ocupación británica de la isla a partir del año 1800. Por su estratégico lugar, Malta siempre ha sido objeto de deseo y conquista de diferentes imperios, y en esta ocasión le tocaba el turno al Británico. Aquí establecieron una de sus bases navales más importantes de todo el Mediterráneo.

El hecho de ser colonia británica provocó que los italianos y alemanes, al inicio de la Segunda Guerra Mundial, bombardearan intensamente durante más de 3 años la isla (1940-1943). Durante estos ataques, más de 3000 malteses murieron, aunque la isla jamás se rindió.

Tras la guerra, la reina Isabel estuvo viviendo varios meses en Malta, mientras su marido, el duque de Edimburgo, servía en la Base Naval Británica. Finalmente, en el año 1964 Malta consiguió la independencia como nación y en 1974 como República.

5/5 - (4 votos)

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

  • Responsable » Sergio Martínez Gallego
  • Finalidad » gestionar los comentarios.
  • Legitimación » tu consentimiento.
  • Destinatarios » los datos que me facilitas estarán ubicados en los servidores de Webempresa (proveedor de hosting de Con Billete de Vuelta) dentro de la UE. Ver política de privacidad de Webempresa. (https://www.webempresa.com/aviso-legal.html).
  • Derechos » podrás ejercer tus derechos, entre otros, a acceder, rectificar, limitar y suprimir tus datos.